lunes, 18 de noviembre de 2013

Naïf. Super, de Erlend Loe

"Un ser humano que pesa setenta quilos contiene entre otras cosas:

-Suficiente caliza para blanquear un corral
-Suficiente fósforo para hacer 2.200 cerillas
-Suficiente grasa para fabricar aproximadamente 70 pastillas de jabón
-Suficiente hierro para hacer un clavo de cinco centímetros
-Suficiente carbón como para hacer 9.000 puntas de lápices
-Una cucharada de magnesio

Peso más de setenta quilos. "

"Si el universo es efímero podemos sentir que la existencia humana no tiene sentido. ¿Para qué hacer algo? Por otro lado es tentador tratar sacarle el mayor provecho. De todas formas estoy aquí. La imaginación no sirve de nada cuando intento imaginar dónde estaría si no estuviera aquí"



Hace no mucho leía un artículo en The New Yorker sobre un ensayo escrito durante la República de Weimar por un buen hombre, un sociólogo que apuntaba premonitoriamente al centro de la diana de nuestro presente para denunciar nuestra predisposición a la conectividad: estamos perpetuamente receptivos a "lo nuevo" que caduca en instantes y que es reemplazado por algo "aún más nuevo". No tenemos tiempo de aburrirnos, al fin y al cabo, todos llevamos tecnología en los bolsillos, nos ciegan las luces de neón, nos ensordecen los anuncios a todo volumen, siempre en un tono que nos induce a consumir para realizarnos personal e incluso socialmente, a estar en un eterno estado estado de autoactualización. En breve, no disponemos de tiempo vacío y confundimos tiempo vacío con tiempo perdido. Una de las frases más reveladoras del ensayo da bastante que pensar "La gente que hoy en día tiene tiempo de aburrirse y todavía no se ha aburrido es tan aburrida como la gente que se las arregla para no aburrirse nunca" Resulta que quizás sería conveniente aburrirnos un poco más.

El protagonista de Naïf. Super se aburre, se aísla y pasa mucho tiempo consigo mismo. Su hermano mayor ha viajado al extranjero y le ha dejado vivir en su apartamento durante su ausencia. Pasa las horas pensando, sin saber qué hacer coge un libro de la estantería, un libro que habla sobre el universo, que expone diferentes teorías sobre su origen y su fin y va tomando consciencia de sí mismo, de su lugar en este caos que habitamos, hace listas, muchas, sobre cualquier banalidad que le pase por la mente, cualquier tema que lo ayude a conocerse y a dar sentido a la existencia. Para matar las horas jugará con una pelota roja, con un juego infantil de mesa y conversará con un niño de nueve años. La mayoría de personas que lo rodean no entiende bien su actitud, creen que pierde el tiempo, que piensa demasiado.Su hermano lo incita a salir de la coraza proponiéndole un viaje a Nueva York. Sin embargo, si prestamos atención, nos damos cuenta de que el protagonista vive, conoce a una joven, explora el mundo en actitud pasiva, simplemente se deja vivir.

Un libro que me entusiasmó por su trasfondo filosófico y existencial, muy accesible, un libro directo, está compuesto de un buen número de capítulos muy breves. Tiene un tono divertido, irónico, arranca sonrisas durante la lectura y por ello no puedo más que recomendarlo advirtiendo que mi entusiasmo supera con creces la propia calidad del libro pero confiando en que produzca el mismo efecto en quien lo lea.

31 comentarios:

  1. Ésta no me llama mucho la atención, Yossi. Si me decido a leerla en un futuro, serás el priemro en saberlo jajajjj. Besos.

    ResponderEliminar
  2. El trasfondo ese que comentas en mi caso necesistaría encontrar un momento adecuado. No obstante me ha llamado la atención la novela.

    ResponderEliminar
  3. Siempre me ha llamado la atención cuando alguien decide que "se piensa demasiado" o que "alguien pierde su tiempo". ¿Psicología? o ¿Filosofía?, a veces parecen confundirse.
    Un libro que me va a hacer pensar y al mismo tiempo me va a divertir, seguro lo que disfruto.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  4. Yo siempre lo digo, no tengo tiempo ni de aburrirme, aunque creo que en el fondo soy un poco aburrida.

    Bona setmana!!!

    ResponderEliminar
  5. Si tuviera un pulsador de concurso de la tele, ahora mismo estaría dando golpes seguidos -como si con el primer impacto no bastase- pang, pang, pang! ¡¡Ella lo sabe!! Vale, no, no lo sabe, pero quiere saberlo :)
    Creo en los tiempos dispersos o más bien los asumo y me los explico para que no parezca que he perdido el tiempo, sino que han sido una rumiación necesaria (o una paranoia importante, pero para paranoia la del tiempo en sí).
    En cuanto a Super, entiendo su obsesión por las listas, quiero saber de esa actitud suya (pasiva, contemplativa, dejarse vivir...).Entusiasmo 10- Calidad... menos, me quedo con la primera parte ¡me lo llevo!
    Un beso y feliz semana :)

    ResponderEliminar
  6. Vivir ignorando lo efímero del universo es, para mí, la única manera de vivir. De otro modo, ¿quién puede con la depresión? :)

    No sé si puedo sacrificar la calidad del libro en aras del trasfondo filosófico y existencial, tengo bastante pendiente de leer y más bien poco tiempo :o

    Me alegra escuchar tu entusiasmo, pero creo que este texto por ahora no me llama...

    Un beso!

    ResponderEliminar
  7. Esta vez es un libro que no estoy muy segura de si llegaría a disfrutar, por lo que lo dejaré pasar
    besos

    ResponderEliminar
  8. Pues no sé si será mejor pesar más de 70 o menos...es que lo del jabón me ha recordado al sacamantecas.
    El caso es que teniendo la lista de pendientes que tenemos y una sola vida ya da para no aburrirse nunca. No sé, no estoy muy de acuerdo con eso de que los que no nos aburrimos nunca seamos aburridos. Así que ya veremos qué hago con el libro porque lo mismo antes de aburrirme saco la guillotina a pasear...
    Un besito, Yossi.

    ResponderEliminar
  9. Un libro que merece la pena si nos hace parar un poco el ritmo de vida que llevamos y nos hace sonreir.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  10. ¡¡Hola Yossi!!
    Parece muy interesante la propuesta que nos traes, últimamente necesito evadirme con lecturas que me saque más de una sonrisa.
    Besos y feliz semana.

    ResponderEliminar
  11. Me da que es de mi estilo. Me ha parecido muy interesante. ¿Crees que me gustará? Un abrazo

    ResponderEliminar
  12. Qué curioso, ese tono tan filosófico me gusta y el tema lo veo interesante...y parece divertido. Con la sinopsis ya me ha robado varias sonrisas.
    Un beso!

    ResponderEliminar
  13. A mi me encanta tener tiempo para aburrirme, pero no siempre me dejan... El libro lo tenía anotado gracias a un amigo que me descubre libros de esos poco conocidos pero muy interesantes (al menos a priori). Pero lo que de verdad me ha enganchado es el ensayo que comentas ¿no puedes darnos más pistas? Aunque sospecho que igual no está ni traducido ¿no?

    Besos de tarta! :D

    ResponderEliminar
  14. Anotadillo me lo llevo, ya sabes que a veces caigo con lo existencial y si además el tono no lo hace demasiado pesado, como podría parecer a priori, tantísimo que mejor. Es cierto eso de que siempre estamos más predispuestos hacia las novedades, no sólo tecnológicamente hablando, y a veces nos cuenta valorar más lo que tenemos.

    Un abrazote!

    ResponderEliminar
  15. Un libro que te invita a pensar, a reflexionar y además te arranca alguna que otra sonrisa? Me lo apunto! No sé cuándo caerá, eso sí, que ya sabes como está la lista de pendientes.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
  16. Muy interesante. Este no lo conocía, ni me sonaba de nada...
    Gracias por la reseña =)

    Besotes

    ResponderEliminar
  17. Qué envidia ser parte del primer mundo, Yossi! Hace más de dos meses que intento hacerme de un ejemplar, sin suerte. No obstante, lo tengo apuntado. Tu reseña fortalece mis expectativas. Recibe un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  18. Puede que sea yo, pero hay un nosequé en la actitud que describes que me hace pensar en el protagonista de Dance Dance Dance, quizá ese dejarse llevar que cuentas. Dicho eso, no tenía ni idea de que existiera ese libro y suena súper-interesante!

    ResponderEliminar
  19. Me gusta sobre todo eso del trasfondo filosófico.

    ResponderEliminar
  20. No lo conocía, pero vaya, parece justo para mí. Me apetece leer algo así.
    Recuérdame, por cierto, que te hable del último libro que me he terminado, "Las bellas extranjeras"
    Besos

    ResponderEliminar
  21. Me gusta Super, es un tío solitario y a la vez lleno de preguntas... pero me pone triste. Comprendo a la familia, él tendría que salir más de su refugio porque esa burbuja que le separa del mundo, cada vez será más apasionante quizás... pero también flotará más lejos del suelo.
    Un beso

    ResponderEliminar
  22. Pero donde encuentras tú estos libros tan condenadamente atractivos? Me has dejado de piedra: el párrafo inicial me ha impactado, pero tu reseña me hace apuntármelo ipso facto y buscarlo en lo que pueda (que por lo que acabo de consultar, no es fácil de conseguir por mis lares) 1beso!

    ResponderEliminar
  23. Hmmm, me quedo dubitativa, no por ello pienso que pierdo el tiempo puesto que dudar siempre es un saludable ejercicio :))
    Me da que es un libro con el que hay que incorporar una cierta predisposición.

    Veremos, sigo dudando ¿y perdiendo el tiempo?

    Muy buena reseña. La República de Weimar es una época convulsa y tremendamente interesante.

    Un abrazo!!

    ResponderEliminar
  24. Sí es un tema eso de vivir de forma pasiva, dejarse vivr como dices. Me quedo con tu entusiasmo.

    ResponderEliminar
  25. Parece interesante pero lo comentas al principio y copio literalmente: "todos llevamos tecnología en los bolsillos, nos ciegan las luces de neón, nos ensordecen los anuncios a todo volumen, siempre en un tono que nos induce a consumir para realizarnos personal e incluso socialmente, a estar en un eterno estado estado de autoactualización". Huyo de todo eso Yossi, la tecnología que uso es la básica, mi móvil es de los más simples, no me aburro nunca, odio las luces de neón, el sonido me acogota. y tampoco consumo para sentirme realizada... De momento. Nunca se sabe. Yo creo que soy de dos siglos atrás jejeje. Besitos.

    ResponderEliminar
  26. Me ha encantado lo que he leído, no conocía al autor pero está re-contra apuntado, lo veo una novedad para mí si bien he leído que es un libro de culto. Es cierto que cuando más tiempo libre tienes, piensas más en cosas abstractas y asuntos existenciales o cosas por el estilo (como también saturarse de la vida, claro), no te ataca la monotonía, el convertirte en alguien cansado ni las preocupaciones del diario vivir, y zas! te llueven pensamientos, incluso de lo más raros me parece. Lo del aburrimiento me suena también algo genial, parece una enfermedad y aquí lo toman de otra forma. Genial. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  27. Me parece interesante, pero me lo apunto para más adelante, cuando pueda leerlo con más calma.
    Besos:)

    ResponderEliminar
  28. Estoy enamorado de tu noviembre. Has dado de lleno en todas las lecturas que has encontrado. O por lo menos, has provocado que me lance a por ellas. Concretamente este 'Naïf.Super' estaba en mi lista de pendientes desde hace tiempo. Y ahora ya no hay vuelta atrás. Ahora tengo que leerlo.

    Ya te diré qué encontré yo en la soledad reflexiva de este chico.

    Little bye!

    ResponderEliminar
  29. Me llama mucho!
    Aunque, no sé si me acordaré del nombre :p
    Gracias por la reseña :D
    Un saludo, te espero por: "Los libros de Mari"

    ResponderEliminar
  30. Me parece una lectura muy interesante y a la vez algo compleja. Me explico: Me apetece, por lo divertida que parece, pero no tengo ganas de debates mentales. Que estoy algo vaga, vamos. Pero me lo llevo.
    Besos
    Cita

    ResponderEliminar
  31. Creo que es de esas joyas que descubres de modo casual y en este caso el que lo propicia eres tú aunque quizás la reflexión que cada uno haga del libro sea de entusiasmo distinto. Yo le daría un voto de confianza

    ResponderEliminar